Heredera divorciada Novela de Juliany Linares

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Anónimo.
Los últimos detalles con relaciones publicas quedaron resueltos, solo quedaba esperar a la fecha del lanzamiento de la nueva
marca y trabajar arduamente con mi nuevo proyecto cuanto antes, me resultaba dificil de creer que todo estaba avanzaba tan
rápido,
Sofia, la jefe de relaciones publicas de L&J, abandonò el despacho no sin antes darme unas lindas palabras por el cariño que le
tiene a mis padres. Volvl a mi asiento, observando una vez más los documentos de la nueva empresa y unos toques en la
puerta me interrumpieron,
Dejé cada documento en orden sobre el escritorio y me acerqué a la puerta para abrirla, el sonriente rostro de Alexander
apareció ante mis ojos y me preocupé al ver que no estaba con Tristán.
parte.
¿Dónde está... no me dejó ni siquiera terminar de formular la pregunta, cuando recibi una respuesta despreocupada de su
-Tristán quedó rendido después de jugar un poco de béisbol, pero antes, le he dado un baño, asi que no te preocupes por nada,
Maga me avisará si se despierta. -informó dejándome sorprendida por lo mucho que ha avanzado con nuestro hijo y me
alegraba de sobremanera, porque jamás imaginé a Alexander asumiendo tan bien su papel de padre, lo responsable y dedicado
que seria. Me culpaba infinitamente por el tiempo que les negué disfrutar el uno del otro, fui tan egoista. -Hey, no, no quiero ver
esa carita triste, ya sé lo que estás pensando y créeme que eso ya no importa, quedó en el pasado con todo lo malo, lo que
importa es el ahora, el tiempo que estoy recuperando con Tristán.
Sorpresivamente, Alexander supo lo que pasaba por mi cabeza y trató de hacerme sentir mejor, lo logró cuando pasó sus
manos por mi espalda y pegó su cuerpo con el mio, envolviéndome con su calor y su perfume embriagador. Levanté la mirada
para observar sus ojos mieles que me miraban con aquel brillo especial.
-Tristán te quiere mucho, -admente y recordé la primera impresión de Tristán, le temia al hombre malo y ahora lo
adora.
-¿Y tú? ¿También me quieres?-su repentina pregunta me tomó por sorpresa y no quise responder, estábamos hablando de
nuestro hijo. No me respondas, en algún momento me lo dirás sin que te lo pregunte. Ahora, quiero hablar de algo importante y
es que, no me gusta la idea de que estés sola en esta casa, sé que estás con Abby, Maga, el chofer y los guardias que he
contratado, pero recuerda que las cosas están calientes y tus padres aún no vuelven, asi que, he estado pensado en quedarme

unos dias para cuidar de ti y de mi hijo, solo asi puedo estar más tranquilo. -abri mis ojos desmesuradamente, al mismo tiempo
que un escalofrio recorria mi espalda y negué con mi cabeza en respuesta.
– Definitivamente, no.-respondi de inmediato, negándome a tal barbaridad, no sabia exactamente el porqué no queria que se
quedara, aunque es lógico que se preocupe por la seguridad de su hijo.
Abrió la boca para hablar, pero la volvió a cerrar cuando fue interrumpido por unos golpes en la puerta, sin esperar una
respuesta de mi parte, la puerta fue abierta, dejando a la vista un serio Vincent sin rastros de mi amiga, pero siendo
acompañado por Julián, automáticamente me separé de Alexander y miré con sorpresa al visitante.
Julián, bienvenido. -lo saludé desde mi lugar y escuché un leve bulido de irritación detrás de mi.
Me alegro mucho de verte, Sarah, disculpa por venir sin previo aviso, pero estaba preocupado por ti y hasta ahora he tenido un
tiempo libre con todo esto de los nuevos cambios en Doinel...-detuvo sus palabras, al darse cuenta de que estaba hablando de
la empresa que se me arrebató con trampas, porque, aunque las averiguaciones de Vincent notificaban que los papeles del
traspaso eran legales, porque mi padre firmó estando cuerdo, sabia que fue un engaño de esa familia. -Lo siento. ¿Cómo has
estado? – Julian reflejaba sus palabras en su rostro, en realidad se notaba preocupado por mi y eso me sorprendia, digo, lo
conozco desde hace poco y no lo vela desde la última vez que estuve en Doinel.
Qué amable de tu parte. Las cosas marchan muy bien dentro de lo que cabe, mis padres siguen sin aparecer, pero dejo ese
asunto en manos de profesionales, yo sé que en algún momento volverán sanos y salvos. -respondi sincera, sin mostrar lo triste
que me ponia que no estuvieran aqui para ver lo que voy construyendo poco a poco..
-Claro que volverán y seguramente recuperarán la empresa. -las palabras positivas de Julián me hacian querer pensar que
habla siquiera la más minima posibilidad de recuperar la empresa, pero sin mi padre aqui para explicar lo que pasó, seria casi

imposible.
-Ni falta que le hará, ahora con la nueva empresa de Sarah que le hará la competencia directa a Doinel, seguramente los dejará
en desventaja. -Vincent intervino con evidente molestia en su voz y le dediqué una mirada de pocos amigos por soltar esa
información que queria seguir manteniendo bajo perfil hasta el último momento, sin antes consultar, era obvio que seguía dolido
por habérselo ocultado, pero tenia mis motivos y por supuesto el seria una pieza fundamental para L&J.
Julián no pudo ocultar su sorpresa y me miró sin poder creerlo.
-¿Tienes nueva empresa? ¿De verdad? Felicidades. Justamente tenia la idea de asociarme con una empresa de moda en
Paris, que no fuera Doinel, por supuesto. Si estás de acuerdo, podemos hablar de negocios, seria un honor para mi seguir

trabajando con Sarah Doinel.la propuesta de Julián sonaba muy bien, su empresa había llegado muy lejos en tan poco tiempo,
con mucho esfuerzo de su parte y un arduo trabajo, en este momento me estaba identificando con él, no era mala la idea de
asociarme con un empresario tan centrado y serio en los negocios.
Pude sentir las curiosas miradas del par de hombres, sobre todo la de Vincent, quien me lanzaba dagas con los ojos esperando
mi
respuesta.
-Claro que estoy de acuerdo, debo terminar de pulir algunos detalles, pero luego de eso podemos tener una reunión.-respondi
con una sonrisa de medio lado y la expresión de Vincent fue un poema.
-¿Qué? A él lo tomas en cuenta antes que a tu familia, eres increible. Alexander, esto es tu culpa.-Vincent señaló con su dedo
Indice a Alexander y senti tanta vergüenza por lo que Julián tenia que presenciar.
-¿Mi culpa? ¿Yo que hice? Yo también deberia estar alterado, soy el padre de su hijo y tampoco me tomó en cuenta.-apreté el
puente de mi nariz con irritación por la repentina discusión entre “los primos” y miré con pena a Julián que parecia querer
desaparecer con un chasquido.
-Claro que tienes la culpa, gracias a ti se volvió una mujer fria y sin sentimientos.-Vincent estaba llevando todo al máximo punto
del drama, estaba tan cegado por la indignación que no pensaba las cosas antes de decirla.
Serà fria con los demás, porque conmigo....
-Ya pueden dejar de discutir como si yo no estuviera presente.-interrumpi las palabras con doble sentido de Alexander y la
discusión de ese par como fueran unos chiquillos.-Julián, disculpame por esto, ¿hablamos en otro momento sobre la
asociación? Ahora mismo necesito hablar con Vincent y Alexander.
-Disculpame tu a mi, no pensé que fueran a reaccionar de esa manera. Estaré disponible en cualquier momento para ti, bien
sea por temas de negocios o porque necesites un amigo, puedes contar conmigo para lo que sea. Espero que todo mejore para
ti, no mereces nada de lo que te está pasando. -Julián dio un paso para acercarse a despedirse de mi, pero se detuvo por
completo al mirar detrás, supe que no se atrevió por Alexander, entonces, fui yo quien se acercó para despedirme con un beso
en la mejilla, no le debia explicaciones a nadie.
-Muchas gracias, Julián..

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-Entonces, me retiro. Hasta luego. -sin más, Julián abandonó el despacho bajo las fulminantes miradas de ambos hombres, que
pronto se dirigieron hacia mi, esperando que dijera algo.
No pude soportar estar en medio de la tensión que habian creado por la inesperada visita y la propuesta de Julián, asi que, sin
mirarlos, caminé hasta la silla detrás del escritorio y esperé que alguno de los dos rompiera el silencio.
-No puedo creer que prefieras trabajar con un recién conocido. -y Vincent fue el primero que habló con indignación, ganándose
una divertida mirada de mi parte que solo hizo que su enojo aumentara,
Antes de que siguiera soltando palabras sin estar enterado de nada, decidi aclarárselo.
-Serás el vicepresidente de L&J, ¿cómo vas a pensar que te dejaria fuera de esto? Has estado a mi lado incondicionalmente y
juntos hacemos un gran equipo de trabajo, ¿ya
drásticamente a una más relajada, incras el drama? Has arruinado la sorpresa.-informé inmediatamente y su expresión cambió
una sonrisa se asomó en su rostro, pero era casi inexistente.
-Oh, zen serio?-preguntó calmado, como si hace unos segundos no estuviera a punto de formar una tormenta en un vaso de
agua. -Siendo así, no le veo problema alguno a que el Sr. Ferrer forme parte de L&J, es un buen empresario y su epipresa se
está dando a conocer muy rápido, nos serviria de mucha ayuda si vamos a comenzar de cero,-pronto, habló de la propuesta de

Julián y negué divertida con mi cabeza por su cambio de ánimo. El único que no parecia muy feliz, era Alexander, que nos
miraba como si todo esto fuera una broma..
-Ok, estoy un tanto desconcertado y confundido, a ver si entiendo mejor, cuentas con el apoyo de todos y no pensaste en mi.
Sarah, ¿no me tomaste en cuenta? El prestigio de mi enpresa seria favorable para L&J. También podemos hablar de negocios,
dame una fecha, que sea la misma que la de Julian, también quiero ser accionista. -Alexander no se quedó atrás y aunque
antes no me habia mencionado ni una sola palabra, sabia que moria de ganas por ser participe de mi nuevo proyecto y solo se
motivo a hablar gracias a Vincent y la oferta de Julián.
-Alexander, lo que menos quiero es que relacionen mi empresa con mi exesposo, si en un futuro tengo éxito, quiero que le den
créditos a mi esfuerzo y al de cada trabajador de mi empresa y no a las grandes influencias como lo seria Lancaster Collection.
Lo siento, pero no puedo aceptarte como accionista. -dije sincera, aunque en el futuro necesitara ayuda, no recurriría a la de
Alexander, se prestaria para rumores malintencionados y era lo que menos queria, pues ya habia muchas notas en la que nos
relacionaban y no de la mejor manera.

-¿Hablas en serio? ¿Crees que no lo harán con Innova? ¿Crees que no van a relacionar tu éxito con el Sr. Ferrer?-negué con
mi cabeza con seguridad, pues habla una gran diferencia entre ambos.
-Entre tu y yo hay una historia, muchos creyeron que me case contigo por interés, además que LC está en una buena posición,
con cualquier empresa que te asocies es un éxito asegurado, pero no quiero aprovecharme de eso, Con Julián no tenemos
ninguna relación más que laboral, a pesar de que su marca no es tan reconocida, es un empresario que està subiendo a
grandes zancadas por su propia cuenta, con su habilidad para los negocios y su empresa bien constituida, no quiero tener
ventaja, solo necesito hacer esto por mis méritos propios-mi respuesta lo dejo callado y pensativo, después de intercambiar
algunas miradas con Vincent, quien asentia con la cabeza dándome la razón, levantó sus manos como si se estuviera rindiendo
antes de tiempo.
Está bien, no meteré mis narices en tus asuntos, aunque no esté satisfecho, dejaré que logres tus objetivos por tu cuenta. Sé
que eres capaz y eso es lo que me deja tranquilo. -suspiré aliviada por la facilidad con la que aceptó mis decisiones, sin
necesidad de crear un drama como el de mi primo. -Pero que sepas que Alexander Lancaster está a tu disposición cuando
creas conveniente, solo tento en cuenta, no diré nada más.
Asenti con mi cabeza y antes de poder saltar una respuesta, la puerta fue abierta por una nerviosa Abby, quien se adentró a la
oficina
ignorando al par de hombres de pie frente al escritorio y dejó un sobre blanco en el escritorio, la mirè confundida, sin tener la
más minima idea de lo que se trataba.
Hoy todos están muy raros,
-Ha llegado una carta para ti.-dijo con la voz temblorosa por los evidentes nervios y fijé la mirada en aquel sobre sellado, el cual
tomé entre mis manos para darle un vistazo por todos lados, pero estaba en blanco, no había un nombre de remitente ni sello,
no había
nada
– ¿Quién lo ha mandado? ¿Cómo sabes que es para mi?-pregunté comenzando a preocuparme por el sobre misterioso que
temia abrir, con los sucesos de las ultimas semanas, no sabia si se trataba de un explosivo o una trampa.
He visto un hombre merodeando por el jardin, cuando fui por él para encararlo, soltó el sobre en el jardin y se fue corriendo
antes de decir que era para Sarah Doinel. -Abby respondió con los nervios de punta y cuando Vincent se acercó para calmar
mostrándose indiferente hacia él, lo que me decía que la conversación entre ellos no tuvo éxito.

alejó
Alexander me quitó el sobre de las manos y me levanté de mi asiento cuando se alejó a un rincón del despacho y con mucho
cuidado, lo abrió, mis nervios comenzaron a burbujear en mi sistema, pero me calme al darme cuenta de que no pasó
absolutamente nada y que lo que habia dentro era una hoja doblaba con algún escrito que desconocia
-No es de gravedad, es solo una carta de algún anónimo, léela. -dijo Alexander al asegurarse que no corriamos algun peligro
con aquel sobre y me lo devolvió para que lo le echara un vistazo.
la con el
Cuando desdoblé la carta, me encontré con un corto texto escrito a puño y letra y tuve que sentarme de nuevo en mi corazón a
punto de salirse de mi pecho, la respiración agitada y las manos temblando, al reconocer la caligrafia plasmada en el papel,
pero más aún, con lo que estaba escrito.
“Los Dubois tienen los dias contados, aguanta un poco más.
Un anónimo, no tan anonimo”