Capitulo 119 No vino a hablar de negocios con Diego, tampoco fue citada por Rafael como siempre La recepcionista, por supuesto, le preguntd Tiene una cita? “No. ‘Violeta se sinti6 avergonzada Lo siento, si no tiene una cita, le pediria que la solicite primero, dijo la recepcionista con cortesia pero firmeza “Sin embargo, el Sr. Castillo tiene una agenda muy ocupada, incluso si hace una cita, no hay garantia de que pueda verlo Actualmente, esta programado hasta dentro de tres meses” Violeta apreto los labios.
De repente se dio cuenta de que no era tan facil verlo Violeta no tuvo mas remedio que darse la vuelta y salir. Justo cuando estaba a punto de pasar por la puerta giratoria, oy a alguien llamarla por detras. “Violeta!” Raul!” Ella se volvio y vio a Raul vestido con traje “Violeta, ¢vienes a ver al Sr Castillo?”, pregunto Raul “Si Violeta asintio y dijo con sinceridad Necesito hablar con el sobre algo, pero parece que no puedo sin una cita La expresion y la voz de Raul parecian un poco emocionadas Eso es facil, te llevare arriba Subieron en el ascensor hasta la planta superior, donde la impresionante oficina del presidente entro en su vista Rall la llevé hasta la puerta, golpeo y luego la abri6 para anunciar Sr. Castillo, tiene una visita!” En frente del enorme escritorio. Rafael estaba inclinado sobre él, con montones de documentos a ambos lados, y la pantalla de su computadora mostraba las fluctuaciones del mercado de valores. Se podia escuchar el suave sonido de su pluma sobre el papel Su abrigo estaba colgado en la silla de respaldo alto, con los hombros ligeramente inclinados mientras sostenia su pluma, con la cabeza baja, pareciendo un pensador serio.
Al escuchar a Rall, hizo un gesto de asentimiento sin levantar la cabeza.
Raul la miro, luego asintié y salié de la oficina, cerrando la puerta detras de él.
Violeta se quedo de pie en su lugar por un rato, sin que él tuviera indicio de levantar la cabeza. Asi que continuo caminando hacia delante hasta que estuvo a unos pocos pasos del escritorio
Fue entonces cuando se dio cuenta de que no solo habia montones de documentos sobre el escritorio, sino tambien una taza de café frio y una caja de almuerzo, que parecia haber sido ordenada por su secretaria.
Follow on NovᴇlEnglish.nᴇtCuando su mirada se deslizo inadvertidamente sobre estas cosas, se detuvo brevemente.
No era una comida gourmet, sino solo huevo frito con tocino y cebolla, y parecia que no se habia probado aun, ya que la cuchara estaba todavia envuelta en servilleta y toda la comida se habia enfriado.
Violeta se recompuso y dijo. Sr Castillo La pluma en la mano de Rafael se detuvo y él levanto la cabeza abruptamente, sus pupilas se contrajeron rapidamente.
“Lo siento por interrumpir su tiempo personal Violeta apret6 la correa de su bolso *Habla Rafael se recosto.
Violeta sac6 una tarjeta de crédito de su bolso y la puso sobre el escritorio. “Recibi un mensaje ayer, habia depositado otros doscientos mil “Oh, eso Rafael cerro su pluma, algo brill en lo profundo de sus ojos, su tono era neutral. “Probablemente Raul lo olvido ‘Como nuestra relacién ya ha terminado, no puedo seguir tomando tu dinero, asi que esta tarjeta debe ser devuelta a ti. Violeta termino de hablar de una vez y retiro su mano.
“¢ Viniste solo por esto?” Rafael la mir6 f,amente “Y también Violeta trago saliva Bajo su intensa mirada, sac dos cosas mas de su bolso “La llave y este collar..”
No fue como la tarjeta de antes, fue un poco dificil para ella soltar la llave.
Algo parecido a la tristeza cruzé los ojos de Rafar pero no habia emociones evidentes -Cuando volvio a hablar, su voz era notablemente mas fra. Nunca he aceptado de vuelta los regalos que he dado Si no los quieres, hay un basurero a la derecha de la salida.
‘Entonces dejaré que tl lo manejes como quieras Violeta apretd la mano que tenia detras de ella Rafael parecio resoplar friamente. El brazo con la manga de su camisa enrollada se levanté abruptamente y la llave con incrustaciones de diamantes cay6 directamente en la papelera de al lado Al igual que cuando se la dio, hizo un sonido sordo Violeta abrid los ojos de par en par pero no se sorprendic, esto era completamente su estilo.
mbargo, al ver como trataba ese lujoso y costose collar como si fuera basura, no solo sintic lastima por el dinero, sino que simplemente no podia star verlo deshacer des collar de esa manera. Ella no podia recogerio como lo hizo en ese entonces, por lo que apreto los dedos durante todo el dence. No molestare mas at Sr. Castillo med de hablar y se dispuso a marcharse Cap.io 119 Vicleta, realmente no lo vas a pensarlo bien?” Violeta se detuvo y levanto la vista, esos ojos profundos y pensativos nunca la hablan abandonado.
Ella sabia exactamente a lo que se referia.
Casi al instante en que él comenzd a hablar, una sensacion de perdida surgio de su corazén, y a la vez, surgié una resistencia y rechazo.
Violeta enderez6 la espalda, no dijo nada, pero su silencio y su expresion ya lo decian todo Cuando estaba a punto de llegar a la puerta, la voz calmada de Rafael volvi6 a sonar, con una tristeza inconfundible, Violeta, puedo usar los mismos medios que antes para forzante a quedar conmigo” Violeta tuvo que detenerse de nuevo “Qué..” Se gird y lo fulminé con la mirada.
En efecto, no habia ninguna falsedad en sus palabras, y el tenia todo el poder para hacerlo El pueblo no podia luchar contra los oficiales, los oficiales no podian luchar contra los comerciantes, con su estatus e influencia, parece que podia obtener lo que queria. Antes, ella misma tuvo que recurrir a el cuando se encontraba en un callejon sin salida..
Follow on Novᴇl-Onlinᴇ.cᴏmParecia que la sensacion de desesperacion hubiera regresado nuevamente Cuando Violeta se sintio furiosa y sin ningun lugar donde desahogarse, escucho que él decia suavemente, Pero ya no quiero hacer eso Ella se quedo perpleja.
Su corazén se sentia como si estuviera lleno de enredaderas, enredadas y confusas.
De repente, se oyeron dos golpes en la puerta, seguidos de la voz respetuosa de uno de sus subordinados, “Sr. Castillo, la junta de accionistas esta a. punto de comenzar!* Violeta se dio la vuelta y se fue, sus pasos se sentian un poco desordenados.
El sol salia y se ponia, el tiempo pasaba dia tras dia Al final de la jornada laboral, Violeta salié del edificio de oficinas y justo cuando estaba por cruzar la calle, una jeep con placas militares se detuvo frente ella Entrd en el vehiculo con cierta resignacion, Julian, no tienes que venir a buscarme todo el tiempo, en realidad estoy mas acostumbrada a tomar el bus...” “No estoy ocupado estos dias, y principalmente, Nico quiere verte, Julian respondié con una sonrisa amable “Violeta, me pongo nervioso aunque no te vea un dia! El chiquillo asomoé su cabeza desde el asiento trasero.
Violeta se vio superada El carro ingresé a la autopista y ella recordé algo, “Hace mucho que no veo a Elias?” Antes, cada vez que Julian estaba presente, Elias también solia estar cerca.
“El ha estado ocupado con asuntos de la familia, explicé Julian Violeta asintio, sin hacer més preguntas.
Sin embargo, Julian volvio su mirada hacia ella, sonriendo, “Leta, el proximo sabado es tu cumplearios, justo ese dia no tengo nada que hacer, que tal si vamos a un resort para relajarnos?” Violeta se quedo aténita, casi se le habia olvidado.
Pero no respondi6 de inmediato, en su lugar, una expresion de preocupacion cruzo su rostro, “Me temo que la préxima semana no podre