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“Vale, está bien.”

Yael se sobresaltó con el regaño bajo de Dorian y se apresuró a recoger la basura y salir corriendo, sin atreverse a quedarse ni un segundo más.

Ya casi saliendo, Dorian lo llamó de nuevo: “Espera.”

Yael se detuvo en seco, volviéndose hacia él: “¿Si, Señor Ferrer? ¿Necesita algo más?”

El dijo: “Chequea si mi padre y Cintia han contactado con Amelia recientemente.”

El asistente se quedó perplejo: “Que yo sepa, desde que les asignamos guardaespaldas, no han intentado contactar

con ella.”

“¡Imposible!” Dorian ni siquiera lo pensó, “Habla de nuevo con los guardaespaldas, cualquier encuentro casual o llamada cuenta, consiguun registro de sus llamadas recientes.”

“Entendido.” El asistente asintió y se retiró rápidamente, ordenando a sus subalternos conseguir el historial de llamadas recientes de Eduardo.

Después de organizarlo todo, no pudo evitar echar un vistazo a la oficina de Dorian.

Estaba absorto mirando la pantalla de la computadora.

Yael estaba demasiado lejos para estar seguro de si Dorian seguia investigando “cómo reconquistar a una chica que está decepcionada de ti” y tampoco se atrevió a preguntar, pero seguía sorprendido por el hecho de que su jefe, siempre tan controlado y aparentemente desinteresado, estuviera interesado en temas del corazón.

Ese era Dorian, siempre calmado y restringido.

La joven asistente que acababa de recibir las instrucciones lo miró con una cara de shock y no pudo evitar preocuparse: “Señor Yael, ¿está todo bien?”

“No pasa nada.” Yael, volviendo en sí, rápidamente respondió y echó otra mirada hacia la oficina de Dorian.

Su jefe había vuelto su atención a una cabeza de maniquí sobre su escritorio, con una expresión pensativa en su rostro. Luego, levantó el pelo falso y empezó a trenzarlo, frunciendo el ceño, como sumido en sus pensamientos

La asistente también lo sorprendida y perpleja, le preguntó en voz baja a Yael: “¿El Señor Ferrer ha sido poseido?”

“¿Qué dices?” Yael le lanzó una mirada irónica y bajó la voz, “¿Quién no tiene el sueño de ser peluquero alguna vez? El Señor Ferrer está muy ocupado todos los días, ¿no se le permite tener un pequeño hobby para desestresarse?”

La asistente no se atrevió a decir nada más. Un pequeño hobby estaba bien, pero los hobbies de los grandes ejecutivos

que

ella conocía eran todos elegantes y sofisticados, como jugar al golf, coleccionar arte o antiguedades. Nunca habia oido hablar de un ejecutivo que soñara con ser peluquero.

Yael tampoco habia oido hablar de eso, además con la noticia repentina y breve de la hija de Dorian, tampoco había hecho la conexión entre los intereses de Dorian y su hija.

Para evitar que más gente descubriera los peculiares hobbies de su jefe y afectara su imagen de gran ejecutivo entre los empleados, cerró cuidadosamente la puerta de la oficina de Dorian.

Apenas habia vuelto a su asiento cuando la asistente encargada de las relaciones externas entró, informando sobre el trabajo: “Señor Yael, el abogado encargado de la coordinación de trabajo para el Señor Ferrer ha llegado.”

“Bien, dile que espere en la sala de reuniones, estaré allí en seguida.”

Yael atendió a la asistente y girándose, abrió el cajón para sacar algunos documentos.

El proyecto del resort de estilo tradicional estaba oficialmente en marcha y como el proyecto había sido establecido. por la Compañía de Viajes y Vacaciones Esencia, separada del Hotel Esencia, muchos de los procedimientos legales todavía se llevaban a cabo en nombre de la compañia de viajes.

Aunque Dorian habia recuperado el control principal del proyecto, su intención original seguía siendo desarrollar la marca turística del Hotel Esencia. Por eso no integró el proyecto a la compañia matriz: seguia siendo parte de la

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Compañía de Viajes y Vacaciones Esencia. Sin embargo, en un principio, Eduardo había estado a cargo. Después de la ceremonia de colocación de la primera piedra, Dorian retomó el control de la filial y ahora necesitaba coordinar los detalles, incluyendo los contratos legales.

Yael estaba a cargo de esa coordinación, además habla organizado la transición entre el departamento legal de la compañia matriz y el de la filial.

“Avisa al abogado Fidel que venga también, instruyó.

“Está bien“, respondió la asistente de relaciones exteriores. Cuando se giró para salir, se encontró de frente con el abogado de la filial.

“Abogada“, llamó la asistente, y con una sonrisa le dijo, “Vamos a la sala de reuniones a esperar un rato, el Sr. Yael y el abogado Fidel llegarán enseguida.”

“No es necesario. Yo los esperaré aquí afuera.”

La voz de la chica era clara y vivaz, sonaba un poco familiar.

Yael frunció el ceño confundido y no pudo evitar levantar la vista hacia la dueña de la voz. Se quedó paralizado y la llamó con incertidumbre: “¿Julia?”

Julia extendió su mano hacia Yael con total franqueza: ‘Sr. Yael, nos encontramos de nuevo.”

“¿Qué haces aqui?”

Yael cambió a su sonrisa habitual, sorprendido de ver a Julia en el Grupo Esencia.

Julia era conocida por haber seguido a Dorian desde Bariloche hasta Arbolada y por haberlo abordado en la puerta del comedor para declararse audazmente.

Después de tantos años al lado de Dorian, Yael nunca había visto a una chica declararse de manera tan directa y audaz.

Recordaba que la última vez Dorian había rechazado claramente a Julia, incluso la había pasado por alto sin considerar sus sentimientos para irse con Amelia.

En ese momento, Julia se había quedado sentada en un rincón del comedor, mirando a la pareja con una mezcla de tristeza y desafio, pero sin interrumpir. Luego, se había ido en silencio.

Yael pensó que ese había sido el fin de la historia, pero aqui estaba ella de nuevo, apareciendo como abogada de la filial.

¿Acaso habla entrado de lleno en la compañia?

El acceso a la sede principal del Grupo Esencia era complicado, pero entrar en una filial era relativamente fácil.

Además, el Grupo Esencia tenia un sistema de promoción justo. Si alguien demostraba tener habilidades excepcionales estando en la filial, siempre habia una oportunidad de ser trasladado a la sede central.

Julia claramente habia investigado sobre el sistema de promoción del Grupo Esencia.

Ante la pregunta de Yael, respondió con franqueza: “Por supuesto que vine a coordinar el trabajo con usted.”

Yael sonrió: “¿Cuando entraste a la empresa? No habia oido nada.”

“Mi llegada a la empresa no es algo qué pueda alertar a alguien como usted.”

La chica sonrió y no pudo evitar mirar furtivamente hacia la oficina de Dorian, pero la puerta estaba cerrada y no pudo ver nada.

Ella quería acercarse para echar un vistazo, pero temia llamar demasiado la atención, especialmente porque la puerta estaba cerrada y no sabía si habia alguien dentro.

No pudo evitar mirar al asistente y le preguntó en voz baja: “Sr. Yael, ¿el Sr. Ferrer no está?”

Yael sintió un sobresalto, temiendo que Julia, sin temor, irrumpiera directamente en busca de Dorian. Había presenciado la audacia de esa chica antes.

Si se tratara de una atracción mutua, esa audacia seria encantadora.

Pero al no serlo, se convertia en acoso.

“El Sr. Ferrer está en una reunión“, dijo y sin más, la empujó hacia la sala de reuniones: “Vamos, vamos a encontramos con el abogado Fidel.”

Julia todavia albergaba esperanzas y miraba hacia atrás hacia la oficina de Dorian, pero Yael, que estaba detrás de ella, la bloqueó.

“Señorita Julia, si eritraste a la empresa persiguiendo al Sr. Ferrer, te aconsejo que renuncies cuanto antes“, normalmente él era todo sonrisas, pero en ese momento no la dejaria hacer lo que quisiera. “Si no es asi, céntrate en tu trabajo y no pongas tu corazón donde no debes. El Grupo Esencia no tolera esas actitudes.”

Al final de su advertencia, ya había perdido la sonrisa y su voz llevaba un tono de advertencia.