Capítulo 430
Natalie se mofó, -No creo que lo que estás enfermo de amor, sino de los nervios. Te sugiero que vayas a un psiquiátrico para que te revisen el cerebro.
Tras decir eso, empujó a Leonardo y cerró la puerta de golpe.
Leonardo no se enfadó y dijo: -Natalie, quiero hablar contigo.
Unos segundos después, la voz indiferente de Natalie llegó desde el interior.
-No tengo nada que hablar contigo, vete.
No se oyó ningún ruido desde la puerta, Natalie pensó que se había ido y siguió viendo la
televisión.
Media hora más tarde, el timbre volvió a sonar.
Esta vez Natalie miró al ojo del gato y confirmó que era el repartidor antes de abrir la puerta.
Follow on NovᴇlEnglish.nᴇtAcababa de atender la entrega cuando una figura a su lado entró en el salón.
Natalie se quedó helada y luego dijo fríamente: -Leonardo, ¿te estás divirtiendo? ·
Leonardo la miró inocentemente: -Nohas dado la oportunidad de hablar contigo, así que he tenido que recurrir a esto.
El repartidor miró a Natalie, -¿Le puedo ayudar?
Percibiendo la amabilidad del repartidor, cuando Natalie estaba a punto de hablar, Leonardo dijo.
-Somos pareja, acabamos de pelearnos hace poco. Gracias por preocuparte, ya puedes irte.
Natalie lo miró con los dientes apretados, con ganas de tirarle a la cara la comida que tenía en la
mano.
-¿Quién es tu mujer? No digas tonterías.
-¿El ex marido no es marido?
Natalie: -…
¿Por qué no se había dado cuenta antes que Leonardo era tan desvergonzado?
El repartidor seguía un poco preocupado, así que dijo despacio: -¿Llamo a la policía por usted?
Esta clienta parecía débil, si el hombre quería hacerle daño, definitivamente no podría resistirse.
+15 BONOS
Natalie respiró hondo, miró al repartidor y le dijo suavemente: -Gracias, pero no, puedo resolverlo yo misma.
Al oírla decir eso, el repartidor la dejó y se la vuelta para marcharse.
La cara de Natalie se enfrió rápidamente, llevó la comida directamente al sofá y se sentó, dijo con indiferencia: -¿Qué querías decir? Puedes decirlo ahora y largarte en cuanto termines.
Leonardo caminó hacia el lado opuesto de ella y se sentó, la miró y le dijo seriamente: – Realmente no tengo nada con Matilda. Ellabuscó ese día por negocios y, efectivamente, yo estaba en la ducha cuandollamaste, pero estaba arriba en el hotel y Matilda estaba en el restaurante. Si nocrees, puedes ir al restaurante y ver la grabación.
Natalie le miró con calma.
-¿Terminaste?
Leonardo frunció los labios y no dijo nada, pero era obque en ese momento estaba de mal
Follow on Novᴇl-Onlinᴇ.cᴏmhumor.
¡Natalie no le creía!
-Aún no quieres creerme.
Natalie bajó los ojos, -Por favor, vete cuando termines, no quiero averiguar si lo que dijiste es verdad o no, como tampoco sabes por qué quería romper contigo.
Leonardo frunció el ceño y dijo despacio, -Natalie, si crees que hice algo mal, puedes decirmelo
en vez de haceadivinar.
Natalie se rió burlonamente, -Ya te lo dije, simplemente nunca te importó, ahora que terminaste
de hablar, por favor vete.
El salón se quedó en sileny parecía como si el aire se hubiera detenido.
Pasó mucho tiempo hasta que Leonardo se levantó y salió del chalet.
Natalie echó un vistazo a la comida ya fría y no tuvo ganas de comérsela, directamente la tiró a la basura, apagó la luz y subió las escaleras.
Tras descansar en casa durante unos días, después de que su cuerpo se recuperara, Natalie volvió a MY a trabajar.
Cuando Tina la vio, sus ojos se llenaron de asombro, e inmediatamente se adelantó para agarrarle la mano, temiendo que estuviera alucinando.