Capítulo 463
En los dias siguientes, el equipo de investigacion continuo su trabajo.
Para evitar problemas innecesarios, Evrie solicit6 trabajar desde casa.
Como el nuevo proyecto atin no habia comenzado, Simeon, muy comprensivo, le permitid trabajar a distancia. Blanca iba a la oficina de la corporacion todas las mafianas, y después del trabajo venia a la casa para acompafiarla. Los dias transcurrian con dificultad pero sin mayores problemas.
Hasta que una noticia explosiva se propagé por todas partes: Federico Haro habia sido arrestado oficialmente. Debido a la magnitud del evento, rapidamente captd la atencidn de toda la ciudad.
Evrie la noticia y su corazon un vuelco.
Sin poder evitarlo, hizo clic en la noti estaban en llamas.
ja. La cuenta oficial solo habia publicado unas pocas palabras, pero los comentarios
[Federico, reconozco ese nombre, gno es el suegro de aquella disefiadora de la Plaza de Plata de hace un tiempo?) [Fue investigado tan rapido, definitivamente algo ocultaba.]
[zNadie le esta prestando atencion a Evrie? Digo la verdad, su Plaza de Plata y la imitacion del Parque LR son impresionantes, espero que no se vea arrastrada por la gente de la Familia Haro.]
[Quien tenga esa familia politica, tiene mala suerte, lo mejor seria un divorlimpio.]
[Es dificil no estar de acuerdo con el comentaanterior, si Evrie es inteligente, se divorciara y seguira siendo brillante por su cuenta.]
Cuanto mas leia Evrie, mas oprimido se sentia su corazén.
Follow on NovᴇlEnglish.nᴇtLo que la afectaba no eran esos comentarios, sino Farel...
Con Federico arrestado, gqué seria de Farel?
El es inocente, se veria implicado?
Cerré la noticia y llamo a Farel de inmediato, pero nadie le respondurante mucho tiempo.
Se sentia cada vez mas ansiosa.
Su rostro se puso involuntariamente palido.
—Ding dong—
Se oy6 el sonido de la puerta desbloqueandose con una contrasefia.
Evrie, emocionada, se levant6 abruptamente y camino hacia la puerta.
Habia dado sdlo un par de pasos cuando un dolor agudo en su vientre la hizo tambalearse, Evrie se doblo por el dolor. Clic.copy right hot pub
La puerta se abrio.
Farel apenas entré cuando la frente a él, y rapidamente corrid a sostener a Evrie.
—<¢Qué te pasa, donde te duele? —
Mientras le preguntaba, tom6 el pulso de Evrie.
duele...duele el estémago. — Evrie estaba palida y sudorosa en la frente, —zcdmo volviste, estas bien?— —Deja de preocuparte por mi. — Farel la levanto en brazos, —Eso es por el estrés, te llevaré al hospital —
Evrie rode6 su cuello con los brazos, el dolor la embargaba y la oscuridad nublaba su vista.
Justo al salir, varios empleados uniformados bloquearon su camino.
—Quitense. —
—Pero...—
—Lo diré una vez mas, al auto, al hospital. —
Farel elevé su voz, su tono era temiblemente frio.
Joan irrumpié desde fuera de la multitud, abriéndose paso y gritando —Sr. Haro, abajo, el coche los espera en la entrada. — Farel no tenia tiempo para discutir con esas personas, cerré la puerta de golpe y se llevd a Evrie apresuradamente. En el ascensor, Evrie atin estaba asustada por lo ocurrido.
Soportando el dolor, le pregunt6 con ansiedad —Esas personas... gqué querian? —
—No es nada, no te preocupes por ellos.
—gVinieron a por ti? — Farel se con despre—No pueden hacer nada. Relajate, respira hondo, obedéceme. — Evrie intent controlar su respiracién para calmarse.
Una vez en el coche, Joan condujo rapidamente hacia el hospital.
Follow on Novᴇl-Onlinᴇ.cᴏmFarel la sostenia en sus brazos, sus dedos largos presionaban y masajeaban suavemente su vientre. Durante todo el trayecto, Evrie se aferré a su brazo, con una mirada llena de preocupacion y pena. —No quiero perderte, gte iras? —
En los ojos de Farel hubo un destello de emocion, y le un beso en la frente.
—No temas, noiré.—
—Bien, bien. Que no te vayas es bueno. —
Evrie suspir6 aliviada.
El dolor continuaba, oscureciendo su vision.
Mordié su lainferior, esforzandose por soportar la intensa sensacién de malestar.
—Nuestro hijo... gno le pasara nada, verdad? —
Evrie asintid, su vision se oscurecia cada vez mas.
Entre el vértigo y el dolor, su conciencia se empafiaba poco a poco.
Se esforzaba por mantener ese Ultimo hilo de lucidez, sin soltar el brazo de Farel.
Hasta que Joan, con un grito emocionado, anuncié: —Hemos llegado al hospital. —
Fue entonces cuando Evrie perdié el conocimiento por completo.
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