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Destinada a los gemelos alfas

Chapter 33
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33

El comentario y el tono usado por el beta llamó la atención de los dos machos que se giraron hacia él

con sus cenos fruncidos. El dorado de los orbes de ambos era muy intenso, dado el estado de

excitación de ambos.

-Habla-Dixon ordenó mostrado en sus pupilas la impaciencia que tenía. Su loba y la situación en la

que estaba enredado era un total desastre, cualquier cosa que pudiera aclarar un poco todo aquello

era bienvenido, aunque no lo demostró, Ethan, a su lado era capaz de reírse, aunque no se había

dado cuenta que su hermano estaba en la misma situación.

Desde el inicio Ethan había tenido la intención de hacerse con la manada y vengarse de su maldito

padre que lo había dejado abandonado junto a su madre, pasando incluso hambre y frio, pero al

encontrar a su pareja destinada sola en medio del bosque, aquello cambio sus prioridades. No podía

evitarlo, su instinto era sumamente fuerte y más cuando tenia a su loba delante. La naturaleza los

había diseñado para reproducirse y sobrevivir y por más que luchara contra eso no era algo que podía

dejar de lado.

Entonces… que le impedía tener a las dos cosas, si, su hermano. Si había alguna forma de separarlo

de ella haría lo que fuera, solo si no hubiera el pequeño detalle de que la loba los necesitaba a ambos.

Will sintió la tensión en el ambiente, tragando en seco y sintiendo como el sudor empapaba su

espalda. Tres lobos que no eran fácil de enfrentar juntos no era una fórmula fácil de tratar. Aun así,

respiró profundo. -La verdad es que en estos días he estado estudiando el caso de ustedes y he

descubierto en textos antiguos que hubo un caso como ustedes en el pasado. De una loba que tuvo

dos machos como parejas destinadas.

El interés llenó el rostro de Ethan y Dixon. Will prosiguió habiendo captado toda su atención.

-En esos textos explicaban la conexión tan grande que existe y que una vez juntos la loba no podría

vivir sin ninguno de los dos. Su enlace está dividido a la mitad entre cada uno de sus lobos. Y si estos

pelean o no se llevan bien, o hay sentimientos negativos pasan por ella provocándole dolor e incluso la

muerte – era algo que había comentado antes pero ahora con más fundamentos era más fácil

convencer a aquellos dos machos.

-¿Quieres decir que tengo que llevarme bien con este?- Ethan señaló con el dedo a su hermano

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despectivamente y soltó un jadeó- Esto es increíble, además tengo que ser tolerante y ver como todo

se le pone en las manos como bandeja de plata, incluso a mi mate.

-Ella también es mi mate-Dixon no se movió de su lugar y parecía pensativo, no tenía intenciones de

dejar morir a la loba, ella era una bendición y la primera que le había despertado sensaciones tanto en

su cuerpo como en su alma-Yo tampoco estoy contento con esta situación. pero terminó gruñendo

ante la idea de verla siendo tocada por el otro lobo.

Era un macho dominante y se aferraba a lo poco que tenía. Compartir no estaba en su diaturaleza

Es mejor que se entiendan entre ustedes y busquen una forma de encontrar un equilibrio.

No creo que ella vaya a morir porque nosotros dos… no nos llevenios biej – Ethan cruzó los brazos

sobre su pecho Buscaba una forma de no tener que relacionarse demasiado con Dixon

Will negó con la cabeza.

– Por lo que estuve leyendo eso mismo pensaron aquellos dos lobos. No eran hermanos como

ustedes, solo eran conocidos de la manada, no se llevaban bien dada nuestra naturaleza dominante,

pelearon, encerraron a su mate, intentaron secuestrarla para ellos solos, la

zaron a enlazarse con ellos cada uno por su lado, la escondieron para que el otro no la encontrara y

era de nuevo arrebatada de los brazos de uno para el otro. Los lazos comenzaron a ser dolorosos

para ella ya que no quedaba marcada completamente. Los machos siempre discutian y peleaban por

ver quién era el ganador. La loba no tuvo opción durante todo ese proceso y fue obligada a mantener

la boca cerrada. Como resultado ella se fue marchitando, su alma se fue fraccionando en varios

pedazos hasta que fue demasiado tarde y ella murió en una esquina viendo como ellos peleaban.

Ellos dos se volvieron locos ante ello y se suicidaron. Un silencio largo invadió la estancia después del

beta terminar de decir aquello. Clara, sentada en la cama pudo jurar que los rostros de sus dos

parejas se habian vuelto ligeramente pálidos Una leve sonrisa apareció en sus labios y se contuvo de

bufar. Era prácticamente lo mismo que le estaban haciendo a ella. Solo faltaba que le abrieran las

piernas y se la follaran como animales que eran.

-Ven, se los dije. Duele cuando pelean y más cuando me hacen todas esas cosas sin tomar en cuenta

mi opinión. Así que llévense bien de una puta vez-soltó Clara sin darse cuenta o mediar su vocabulario

ya que no estaba del todo de buen humor al recordar una por una sus no muy agradables experiencias

desde que ellos habían entrado en su vida. Los malditos la habían besado como les había dado la

gana hasta que sus lenguas habían sofocado la suya y podía jurar que casi habían llegado a su

garganta. Los agarres de ellos habían sido fuertes y de seguro quedarian marcas en la piel de ella y,

además, como no se llevaban nada bien su pecho se apretaba dolorosamente. En resumen, quería

patearlo a los dos juntos de una vez para que le tuvieran en consideración. Solo que actuando de esa

forma contrastaba completamente a como ella era delante de ellos normalmente y los tres machos se

le quedaron mirando fijamente.

Clara reaccionó y se dijo a si misma que por el momento debía actuar como la loba sumisa, algo que

la desquiciaba. Viviendo tantos años soportando el dolor en su cuerpo destruido lo menos que tenía

eran emociones de miedo. Así que hizo lo primero que le vino a la mente. Se tocó el estómago y bajó

la cabeza.

Tengo hambre- usó el tono más lastimero que encontró bajando la cabeza hasta que su rostro fue

ocultado por su cabello. Levemente dejó salir sus feromonas para entretener a los dos lobos.

Dixon fue el primero en reaccionar

-Pediré que te traigan algo- dijo encaminándose hacia la puerta. Aun procesaba lo que Will había

dicho antes y eso giraba en su cabeza una y otra vez, solo con pensar que su forma de actuar podia

llevar a la muerte a su mate era…apretó los labios en un intento de bajar su frustración. No debía

dejarse agobiar con cosas como esas.

Camino en dirección a la puerta, necesitaba aire fresco para pensar con inás calma, pero antes de

salir giró su cabeza por encima del hombro,

Ethan lainó a su gemelo con tono autoritario – Tu vienes coninigo.

El otro lobo inclinó la cabeza

– ¿Por qué tendría que hacerlo?-le gruno- No eres nadie para darme órdenes.

Dixon entrecerró los ojos. -Recuerda el trato al que llegamos. No cruces la linea- en sus palabras

había una clara advertencia

Ethan chasqueó la lengua sonoramente, sin embargo, siguió a su gemelo y un minuto después Clara

se quedó sola con Will dentro de la habitación en un silencio total -¿Trato?- ella alzó la cabeza y se

pasó la mano echando el cabello hacia atrás y acomodándose sobre la cama.

Will asintió con la cabeza.

-Digamos que en los días que estuviste enferma, ellos dos de alguna manera llegaron a un acuerdo.

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No sé bien a cuál, ellos hablaron entre ellos y nadie más sabe que ocurrió. Solo por el momento sé

que Ethan puede permanecer en la manada siempre y cuando siga ciertas normas y no se sobrepase

con usted. Mas no le puedo dar más detalles porque no los tengo, no es algo que el alfa haya hablado

fácilmente y su hermano solo me ignora la mayor parte del tiempo – y eso que no había mencionado

que no lo había dejado estar cerca de la loba en los días que ella había estado en cama

-Oh, ahora entiendo- ella hizo una mueca y se quedó pensativa- Esa historia es falsa ¿verdad? Porque

por la forma en que la contaste es una versión un poco más resumida de lo que ellos están haciendo

conmigo y de lo que puede ocurrir. Pero Will negó.

-No menti. Encontre esta historia y las similitudes son solo casualidad- el beta parecía algo

preocupado – Si ellos no se llevan bien y pelean su vida estará comprometida.

Clara miró al vacío.

-AL menos ahora parece que están en una tregua. Sabiendo eso debo tener cuidado de no

provocarlos mucho – recordó como antes habían luchado por tomar el dominio sexual sobre ella,

aunque tenía que reconocer que, incluso al ser bruscos se había sentido realmente bien todo aquello.

Las manos sobre su cuerpo, el calor que emanaban, sus miembros rozándose con ella, duros por la

excitación que les despertaba.

– Ahora, yo soy el que tiene que hacer una pregunta- Will camino y se puso delante de ella.

Clara cruzó las piernas y su rostro se volvió completamente frío. El olor del lobo no le gustaba y su

instinto le decia que algo se traía entre manos.

-¿Qué quieres saber sobre mí? – ella preguntó sabiendo que él iba por ese camino, Will se demoró en

abrir la boca para por fin dejar salir las palabras.

¿Quién eres realmente? Sé que eres Clara, pero hay algo en ti diferente, no como si fueras ella misma

Quiero saber, sino le diré al alía la verdad que he estado escondiendo

¿Me estis amenazando? Clara no retrocedió ante la clara amenaza de Will.

Soy el beta de la manada, mi trabajo es velar por la estabilidad de todos los mierubrus y para OSO no

me importa tener que saber los secretos de cada uno de ellos, comenzando por ti. Asi que respondere

Quien eres Por que está en Clara?

Clara soltó un suspiro largo.

-Y si te dijera que soy la otra hija que mi madre no quería ¿qué dirías? Y Will se quedó aún más

confundido.