Capitulo 1965 Entre exclamaciones de sorpresa, los ojos de Octase estrecharon bruscamente.
Permanecié inmaévil, con la espalda curvada por el agarre de Alicia, rigido, sin moverse por un momento. Ella se detuvo en sus labios por un instante, luego comenzé a moverse de un lado a otro, presionando y acariciando; solo un suave contacto entre cuatro labios, sin rastro de pasion.
Incluso Alicia sentia que ese beso habia sido demasiado torpe para ser presentable.
Alz6 la mirada hacia la expresion casi inmutable de Octavio, y con un aire de desafio, morel lade Octavio.
No fue hasta que fruncirse el cede Octaque decidid soltarlo.
Sus orejas estaban tefidas de rojo.
Sin embargo, mantenia la cabeza alta con una expresion orgullosa, “;Lo entiendes ahora?” El rostro de Octase oscurecié lentamente y observé cémo ella trataba de parecer tranquila. Sus dedos, definidos por sus nudillos, se deslizaron lentamente sobre la zona que Alicia acababa de morder.
Sintié un dolor claro y una leve humedad.
Al ver el liquido rojo en la punta de sus dedos, sus labios se curvaron ligeramente.
“De hecho, te prometi algo. Si esto es lo que quieres, puedo concedértelo.” Alicia sonrié levemente.
“Pero Alicia...” Octacontinud, “;puede confiar en la promesa de un hombre? ;Especialmente una promesa que dura toda la vida? Aquellos juramentos de amor verdadero, ;cuantos se mantienen fieles hasta el final sin distracciones? Ademas, puede que no te ame, y tal vez no siempregustes. No hables con tanta seguridad, deja un camino abierto para ti misma.” [x] Octahablé bastante.
Follow on NovᴇlEnglish.nᴇtPero para Alicia, la frase “puede que no te ame” resoné con claridad.
Se detuvo por un momento, su respiracién se estancé por un instante, y su corazén parecia doler por la falta de oxigeno.
Era una declaracién tan honesta que le daba ganas de rechinar los dientes.
Ella lo desafié a hacer una promesa honesta frente a todos, sin dejarle una salida, y él no le mostré ninguna consideracién.
Inhalé profundamente y finalmente sonrid, con un brillo tenue en su hermoso rostro, asintiendo en acuerdo.
“Si, tienes razén, quizas mi interés en ti sea solo un capricho pasajero. Asi que, sé mi noy cuando sienta que ya es suficiente, lo dejaremos.” Octala miré con una sonrisa fria y sus cejas manifestaron un fsutil.
El silense apoderd del entorno. El apret6 los labios, conteniendo la irritacién en su corazén y miré hacia adelante donde dos personas aun estaban de pie en la plataforma de la escalera.
11.50 Capitulo 1965 Lisandro lo miraba y le hizo una leve sefal de negacién con la cabeza.
Volviendo a bajar la mirada hacia Alicia, su mandibula estaba tensa.
Después de un tiempo, sus labios finalmente se movieron, “De acuerdo.” Alicia sonrié y se colgd del brazo de Octavio, “Este es el mejor regalo de adultez que he recibido. Vamos, te llevaré a comer algo.” Si, el mejor regalo de adultez, no se comparaba con la Villa Alicia que Lisandro habia tardado afos en construir, frente a una relacién que tal vez ni siquiera tuviera amor.
JuValdiva estaba realmente enfadado, “;Es que ese muchacho no tiene ninguna decencia? Mi preciosa nieta no le gusta, ;quién podria gustarle? Poner a Alicia en una situacién incémoda frente a tanta gente.” “Papa.” Lisandro interrumpié al anciano con un tono tranquilo, “Dejemos que los jévenes decidan por si mismos, no podemos involucrarnos demasiado, forzar las cosas no siempre lleva a buenos resultados. Es mejor ser honesto que vivir en engafos. Ademas...” Se detuvo por un momento, observando las figuras de ambos jévenes, y dijo lentamente: “Octatal vez no sienta por Alicia lo que dice, tal vez no sea tan indiferente a ella.” El anciano guardo silenpor un momento, suspiré profundamente y dijo, “Solopreocupa que, como su padre, Alicia podria llegar a ser igual; por alguien como tu, estaria dispuesta a renunciar a todo, a perderse en su obsesién.” Lisandro sonri6, “Eso es mucho mejor que vivir con remordimientos durante toda la vida.” Elanciano no volvié a hablar.
Alicia pidié varios platos en la cocina, todos seleccionados segun los gustos de Octavio.
Las palabras que él habia dicho en la sala parecian no importarle en absoluto a Alicia. Se senté a comer con él, irradiando felicidad.
No parecia estar fingiendo.
Su despreocupacion en varias ocasiones hizo que Octasintiera que tal vez estaba interpretando demasiado sus palabras y acciones.
Pero también sabia que ella no era tonta, habfa algunas cosas que la joven lograba ver con mas claridad que nadie.
En realidad, Octatampoco habia comido mucho. Alicia estaba sentada frente a él y sus ojos no se apartaron de él en ningin momento.
Al dejar los cubiertos, él la miré y dijo, “;Pretendes hartarte de mi lo mas rapido posible para poder alejarte?” Alicia parpaded, “Después de mas de dos afios, ain nohe cansado de ti. ;(Estéds malinterpretando algo cerca de ti?” Octatom6 una servilleta, se limpié la comisura de la boca y, con una sonrisa irénica, dijo, “;No te has cansado después de mas de dos afios? ;No sera eso mas bien tu problema?” “Ah, tal vez tienes razon, probablemente sea porquegustas demasiado.” Octase levantd, voy.” 2/4 1140 Capitulo 1965 Alicia lo sigui6, “¢Ya no vas a comer?” “No olvides que hoy eres la protagonista.” Ambos atravesaron el pasillo con las manos entrelazadas y entraron al salén por la puerta lateral.
Alicia, agarrada del brazo de Octavio, aparecié nuevamente ante todos, y su sonrisa mostraba cuan feliz estaba en ese momento.
&&& La nocion de protagonista que habia mencionado Octavio, ella la estaba experimentando de nuevo.
Alrededor del hombre habia varios individuos mayores que él. Al ver a Alicia, la llamaron a su lado.
“Alicia, este es Enrique, quien ha estado con el Grupo Valdiva por més de treinta afos en las buenas y en las malas. No te comportes con esa despreocupacion habitual y faltando al respeto, jentiendes?” “Entendido. Hola, Sr. Enrique.” Alicia, de buen humor y cogida del brazo de Octavio, era la docilidad personificada.
Pero su paciencia estaba limitada a los accionistas de la empresa y a algunos socios. Después de eso, Alicia intentd huir con el hombre.
Lisandro ni siquiera pudo retenerla y finalmente dirigié su mirada hacia Octavio, “Octavio, cuida bien de ella.” Octaasinti6 con la cabeza.
Follow on Novᴇl-Onlinᴇ.cᴏmPensando que finalmente se habian liberado de esas interacciones superficiales, para su sorpresa, Octala llevé hacia la multitud.
“Ese es el Sr. Sanchez del Grupo Sanchez. El Grupo Valdiva esta colaborando con ellos en un proyecto de parque de atracciones extremas. Vamos a saludar.” Alicia fruncié el cefio, “Hoy es la fiesta de mi mayoria de edad, no una velada social, ;eres consciente de ello?” “Ahora que eres adulta, debes empezar a hacer lo que los adultos hacen. jQuieres seguir viviendo sin preocupaciones como antes?” Alicia parpaded, sus hermosos ojos se iluminaron con una luz brillante, “;Empezar a hacer lo que los adultos hacen?” Esos ojos, llenos de emocion y un toque de timidez, hicieron que Octaapretara sus labios y extendiera la mano para rodear su cintura. Con un ligero apretén, la llevo frente al presidente del Grupo Sanchez con una voz que carecia de emocion.
“Este es el Sr. Sanchez, puedes saludarle.” Alicia inmediatamente sonrié y dijo, “Hola, Sr. Sénchez.” “Muy bien, muy bien,” el Sr. Sdnchez respondié con una sonrisa radiante, “Feliz decimoctavo cumpleafos a la princesa Alicia.” “Gracias.” Después de una breve conversacién, Octala llevé a saludar a otras personas.
Esta vez, incluso Octapudo ver que Alicia comenzaba a parecer incémoda.
3/4 Capitulo 1965 “No quiero seguir, estoy cansada.” Octabajo la mirada hacia ella.
Alicia en verdad se vefa un poco pélida, y una fina capa de sudor cubrfa su frente y la punta de su nariz.
Frunci6 ligeramente el cey baj6 la mirada hacia sus pies.
Sus ojos se posaron en un par de zapatos de tacon alto, plateados y engastados con diamantes, dentro de los cuales reposaban unos pies blancos como el marfil, sus tobillos delicados conectando con las esbeltas piernas en una curva perfecta.
Pero ahora, solo uno de estos pies soportaba el peso del cuerpo, mientras que el otro lado se apoyaba completamente en él.
Al darse cuenta de que Octahabia notado su situacién, Alicia se volvié y hundid su rostro en el pecho de Octavio, extendiendo sus manos para abrazar su cuello, con una voz sofocante y llena de agravio.
“Octavio,duele el pie.” Mireia llegd a la entrada del brazo de Lorena y justo al mirar hacia la direccién de la puerta, a Alicia abrazando a Octavio, con la frente frotandose contra su camisa en un acto de afecto tan natural y ostensible.
Y él no mostraba ninguna reaccion.
Los pasos de Mireia se ralentizaron hasta detenerse frente a ellos. Tenia la mirada pegada a esas dos personas como si estuviera pegada con pegamento.
No podia creer que frente a tantas personas, Octarealmente permitiera que Alicia se acercara tanto a él sin inmutarse.
Esperd, durante lo que pareci6 una eternidad, que él empujara a Alicia a una distancia aceptable.
Pero lo que fue que él retrocedié un paso, se inclind y la levanté en brazos horizontalmente...